Lectores

domingo, 27 de mayo de 2012

¿Como diablos se puede quererte tan fuerte?


Creo que podría estar toda la vida de la forma en que estuve ayer toda la tarde. En tu cama, con tu cabeza en mis piernas, acariciándote el pelo mientras me hablas de todo. Tan sencillo como eso. Me perdia en los trazos de tu cara y me encontraba en tus ojos verdeazulados mientras tu voz servia de banda sonora del momento. Me encantas. Y es algo que va a más con el tiempo, que son más de doscientos días a tu lado y he perdido la cuenta de las veces que creí morirme de amor. Tan sencillo como te quiero en la puerta de casa. No solo hablo de amor, ¿sabes? Hablo de necesitarte. Que si un día no oigo tu voz me siento menos yo. Que  ya me he acostumbrado a que seas la última persona con la que hablo antes de acostarme, y si no es asi, no duermo tranquila. Y ya no hay forma de que concilie el sueño si no tengo a tu peluche, ese que me regalaste en aquel lejano 18 de Agosto. Siempre, siempre, siempre lo abrazo, porque es como si te abrazara a ti, y lo hago tan fuerte porque no quiero que se escape, que me deje sola. Que ya he sufrido de periodos de insomnio sentimental, y sinceramente me gusta más esta época que me regalas, donde mis pies están lejos del suelo. Tan sencillo como esos besos que desatan, que recomponen, que provocan, que trastocan. Porque lo más sencillo y cuerdo que he hecho en esta vida ha sido quererte.